A las 10.00 horas ha entrado por la puerta el primer cliente del día. Ha arrancado con un: «La verdad es que los libros no me interesan», seguido de un: «Déjeme que le cuente lo que pienso de la energía nuclear». Llegadas las 10.30 horas, mi voluntad de vivir era un recuerdo lejano.
Shaun Bythell. Diario de un librero. Traducció de Antonio Lozano. Malpaso, 2018. P. 325.
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