nena amb globus

La travesura de Banksy en la subasta de Sotheby's, en la que una copia de su obra Niña con globo se autodestruyó mediante un triturador de papel incorporado en el marco tras ser adquirida por más de un millón de libras, sugiere una crítica a la mercantilización del street art. En el fondo, lo sorprendente no es la destrucción de la obra, sino que alguien pague estas cifras por una obra reproducida mediante plantillas en innumerables lugares, quién sabe si de la mano de Banksy o de sus colaboradores. Las plantillas para que cada uno pueda pintar este bansky en la pared de su casa se venden en internet por entre veinte y setenta euros, según tamaño. Sin embargo, la broma es cómplice del sistema que denuncia. La compradora decidió quedarse con la obra, que al parecer ha subido de precio tras el happening, y Banksy le ha cambiado el título a El amor está en la papelera. Y Sotheby's se ha apresurado a explicar que es la primera obra de arte en la historia creada en directo durante una subasta. El mercado se apropia rápidamente de la crítica del mercado.

Antonio Monegal. Como el aire que respiramos. El sentido de la cultura. Acantilado, 2022. P. 64.